Declinación y Ángel

Experimentales y llenos de misterio, los textos que componen este libro, trabajan el silencio no como el lugar de las ausencias, sino como el lugar donde los sentidos encuentran su más secreta transparencia. Con una técnica cinematográfica que anticipa el objetivismo francés, Di Benedetto nos devuelve la palabra con todo el rigor de su desnudez.

"Antonio Di Benedetto recibió este lugar: el de escritor secreto. Su prestigio ya existía, pero restringido a los que participaban de una consagración murmurada. A veinte años de su muerte, esas condiciones se han ido transformando: la dialéctica justiciera del olvido y el rescate ya se aplicó a su obra; sus libros se reeditan; la crítica literaria se detiene en él, incluso dedicándole extensos estudios.

En cierto modo es ahora, justamente ahora, ahora que la obra de Di Benedetto es distinguida y rescatada, cuando mejor puede notarse que hay algo del orden del secreto que no deja de serle inherente. Ahora que sus libros vuelven a circular, que la crítica literaria se decide a señalar que uno de nuestros mejores escritores se nos estaba pasando por alto, ahora que autores como Saer o como Sergio Chejfec coinciden en remitirse a él, es cuando mejor puede apreciarse que en su escritura persiste, de todas formas, un cierto carácter secreto. El secreto era su obstáculo, el impedimento de verse reconocido; pero a la vez es su condición, su cualidad, su preferencia; como si la literatura de Antonio Di Benedetto se nutriera del secreto y hubiese hecho alguna clase de pacto con él."

Martín Kohan