Mi viaje a la Rusia sovietista
Fernando de los Ríos (1879-1949) visitó la Unión Soviética en el otoño de 1920, cuando el país hacía el balance de los tres primeros años de revolución e iniciaba el viraje hacia la Nueva Política Económica. Mi viaje a la Rusia sovietista, además de analizar las instituciones económicas, políticas y culturales creadas por los bolcheviques, recoge las impresiones del catedrático y diputado socialista —más tarde, ministro y embajador de la República española— sobre la vida cotidiana de Moscú y Petrogrado, y traza curiosas semblanzas de los dirigentes revolucionarios —Lenin, Bujarin, Trotski, Lunacharski— con los que se entrevistó personalmente. La obra formula una coherente crítica desde posiciones socialdemócratas del rumbo emprendido por los bolcheviques. La concepción del Partido como vanguardia consciente que, a falta de condiciones objetivas para el derrocamiento del capitalismo, sustituye a la clase obrera y ejerce en su nombre la dictadura del proletariado, lleva necesariamente a la supresión de la democracia industrial y política y al empleo masivo del terror; la experiencia bolchevique enseña, así pues, que “el movimiento obrero no puede independizarse de las condiciones históricas de la economía y variar con un acto de violencia el sistema de instituciones que ésta crea”. Completa el volumen un trabajo sobre “Rusia 1922-1934”, escrito para la tercera edición de la obra, en el que se estudian los resultados del primer Plan Quinquenal y de la colectivización de la agricultura, iniciados ya bajo el gobierno de Stalin.